En el Mediterráneo, los artes y aparejos de pesca que se emplean y pueden verse implicados en capturas accidentales son los siguientes:

Palangre

Es un arte formado por una línea madre principal de nilón a la que se unen líneas secundarias donde se insertan los anzuelos. La estructura del palangre puede variar tanto en la longitud de la línea madre como en la distancia entre las líneas secundarias y en el número de anzuelos. En la flota catalana, el 6,1% de la flota en el año 2012 se dedicaba a este arte. Se pueden distinguir tres tipos de palangres:

Es un aparejo de anzuelo formado por un cabo principal conocido como línea madre, del cual penden a intervalos otros cabos secundarios más finos, denominados brazoladas, a los cuales se empatan o atan anzuelos de diferentes tamaños. La estructura del palangre puede variar tanto en la longitud de la línea madre como en la distancia entre las brazoladas, y también en la cantidad y tamaño de los anzuelos. Actualmente, este tipo de pesca representa el 5,7% de la flota catalana (2018). Se pueden distinguir tres tipos de palangres

Palangre de fondo

Dibujo de Toni Mulet sobre la configuración de «piedra-bola» extraído de Cortés & González-Solís 2018.

Las líneas madre pueden alcanzar entre 1200 y 7000 m, y llevar entre 2000 y 3000 anzuelos. Suele usarse como cebo pequeños peces pelágicos como la sardina y la alacha, pero también calamares y otros invertebrados. La especie objetivo más frecuente es la merluza (Merluccius merluccius) y espáridos de gran tamaño como el besugo (Pagellus bogaraveo), la breca (Pagellus erythrinus), el pargo (Pagrus pagrus) o el dentón (Dentex dentex).

Palangre de superficie

Palangre de superficie

Adaptación de una figura de FRDC en sustainablefish.org.

Su estructura es similar a la del palangre de fondo, solo que se añaden flotadores a la línea madre para que los anzuelos queden suspendidos cerca de la superficie del mar. Suelen ser operados por grandes buques que utilizan líneas madre más largas, de hasta 56000 m y un máximo de 5000 anzuelos. Las especies objetivo son principalmente el atún rojo (Thunnus thynnus) y el pez espada (Xiphias gladius), aunque pueden capturar otros túnidos de gran tamaño como el atún blanco (Thunnus alalunga) y la bacoreta (Euthynnus alletteratus) además de especies de túnidos medianos cómo el bonito (Sarda sarda) y la melva (Auxis rochei). Se suele usar como cebo sardinas de tamaño más grande que en las de los palangres de fondo y también caballa o estornino

Palangrillo

Es un palangre de fondo pero de dimensiones menores, usado normalmente por pequeñas embarcaciones que pescan cerca de la costa. Los anzuelos también son más pequeños y se suelen cebar con pequeños invertebrados o peces. Las especies objetivo son muy diversas, por ejemplo peces costeros como el sargo (Diplodus sargus), la mojarra (Diplodus vulgaris), la dorada (Sparus aurata) y la lubina (Dicentrarchus labrax).
Resulta muy difícil calcular el número de embarcaciones que pescan con este aparejo, ya que son artes menores utilizados per embarcaciones de pequeño porte que normalmente alternan diversos artes de pesca según la disponibilidad o demanda de las especies objetivo. En 2018, el 49% de la flota catalana se clasificaba como de artes menores.

Trasmallo

Este tipo de pesca se basa en redes fijas compuestas por tres telas de malla superpuestas. La luz de malla de la tela interior es inferior a la de los paneles exteriores y será la que marcará las dimensiones de los peces que pueden quedar enmallados. Este arte dispone de una línea de flotadores en la parte superior y otra de plomos en la parte inferior que hacen que la red quede estirada formando una pared. El trasmallo será más o menos específico según la luz de malla utilizada, la profundidad y la época del año en que se calen. En el Mediterráneo estos artes de pesca suelen estar limitados a las embarcaciones de litoral consideradas de artes menores. Igual que ocurre con el palangrillo, dichas embarcaciones pueden alternar el uso de trasmallos con otros artes y aparejos, de manera que esto dificulta saber con precisión cuál es su esfuerzo pesquero.

Arrastre

La pesca de arrastre consiste en remolcar por el fondo una red en forma de saco o calcetín. La boca de la red se mantiene abierta gracias a unos elementos divergentes de madera o de metal, denominados puertas, y va capturando todo lo que se encuentra durante su recorrido. Se trata de un arte de pesca activo y poco selectivo, a diferencia de los artes mencionados anteriormente, que son pasivos. Acostumbran a pescar desde cerca de la costa a por peces y marisco variado, hasta profundidades de 700 m en busca de la gamba roja. La flota de arrastre española que opera en el Mediterráneo estaba compuesta por un total de 589 embarcaciones de arrastre de fondo en 2018, de las cuales 208 pertenecían a la flota Valenciana y 227 a la flota catalana (Secretaría General de Pesca).

Cerco

El cerco es un arte de pesca activo destinado principalmente a la pesca de pequeños y medianos pelágicos (sardina, alacha, boquerón, jurel, caballa, bonito y melva) aunque ocasionalmente se utiliza también para la pesca del atún rojo. Se trata de un arte muy selectivo, ya que antes de soltar la red se localiza el banco de peces que se pretende capturar, y posteriormente se rodea con una maniobra del barco. Una vez se ha cercado el banco (de aquí el nombre de este tipo de pesca), se cierra la red por la parte inferior virando un cabo corredero llamado jareta, que pasa per la relinga de plomos. Finalmente, se iza la red por un extremo de manera que la bolsa se va haciendo pequeña y acercándose al costado del barco. Luego, según la cantidad de pescado capturado, se sube a bordo si hay poco, o se extrae con salabardos mecanizados si la captura es abundante.